Andrés: “Me tocó entrar y no lo podía creer”
Admitió el sanfrancisqueño Alejo Andrés sobre el inolvidable momento que vivió el último lunes, cuando debutó en la Liga Nacional con la camiseta de Atenas de Córdoba.
Su sueño de a poco se va convirtiendo en realidad. Igualmente algunas cosas se le dieron rápido al sanfrancisqueño Alejo Andrés, que en los primeros días de febrero se instaló en Córdoba para sumarse a un club muy importante como Atenas con la meta de ser jugador profesional de básquet. El "Griego", que pelea por quedarse en la Liga Nacional, el último lunes le ganó como local a Quilmes, se puso 2-0 arriba en la serie, y cuando faltan unos minutos para el cierre el entrenador Osvaldo Arduh hizo ingresar a Alejo, quien se dio el lujo de encestar un triple.
LA VOZ DE SAN JUSTO se puso en contacto con Alejo Andrés, quien sobre ese inolvidable momento en su joven carrera reconoció: "Me tocó entrar y no lo podía creer".
Alejo tiene 18 años, mide 1,90 m. y juega como base. Surgió de El Tala y desde el 3 febrero está en el "Griego" cordobés, uno de los clubes históricos de la LNB. "Es un orgullo inmenso estar en una institución tan grande como Atenas", subrayó el hijo de Gabriel Andrés, un reconocido exbasquetbolista que se destacó vistiendo la camiseta de El Tala.
"Mi debut en Liga Nacional fue contra Quilmes de Mar del Plata el pasado lunes, jugando por la permanencia. La verdad que no lo esperaba para nada porque es una serie difícil ya que estamos jugando por conservar la categoría. Pero bueno, me tocó entrar y no lo podía creer", admitió el joven que terminó sus estudios secundarios en el la Escuela Normal Superior Dr. Nicolás Avellaneda.
"En el último partido se dio una amplia ventaja (ganó Atenas 99 a 65) y lo veníamos hablando con Ignacio Segura y decíamos 'mirá si entramos'...y justo un rato después nos llama Bruno Lábaque (uno de los asistentes de Arduh) y me pregunta si quería entrar, ¡le dije que sí!, quería correrme todo. Ya en la cancha (jugó 2' 30'') se me dio la posibilidad de tirar un triple, dije 'que sea lo que Dios quiera' y por suerte entró", recordó con emoción.
"Es un orgullo inmenso estar en una institución tan grande como Atenas, por todo lo que ha ganado a lo largo de su historia. Le estoy muy agradecido al club, esta es una experiencia inolvidable para mí, por irme tan chico de mi casa para hacer lo que me gusta", subrayó el jugador surgido de las inferiores del "Albo".
Andrés comparte el plantel superior de Atenas con otro coterráneo que también se formó en El Tala, Bruno Barovero. El "Griego", después de hacer pesar la localía y ponerse 2-0 al frente en la serie por la permanencia, este sábado -a partir de las 21-, visitará a Quilmes de Mar del Plata buscando un triunfo que le permita seguir en la elite del básquetbol argentino.
Aprendiendo y soñando
"Siempre trato de aprender de los otros jugadores. Nosotros acá en el club a veces tenemos la posibilidad de almorzar con Walter Herrmann (campeón olímpico con la 'Generación Dorada') y Fernando Martina, que ya han pasado por todo lo que estamos viviendo nosotros cuando eran chicos y siempre escuchamos sus consejos", reveló.
"La verdad que es una lástima que se esté peleando la permanencia, por todo lo que es Atenas, pero ambiente de descenso, acá no hay. Eso es lo bueno que tiene el equipo, la cabeza siempre está bien, nunca hay bajones, siempre vamos al frente", destacó.
En tanto, se ilusiona con llegar a su meta como deportista. "Mi sueño como jugador de básquet es vivir de esto, como pretende todo chico de mi edad que practica este deporte. Lo que estoy viviendo hoy se dio muy rápido, como entrenar con el plantel de Liga Nacional, equipar y después debutar, como pasó el lunes. Esto que me pasa es lo que uno va a armando, se va proponiendo, para lograr ser jugador de básquet profesional".
El Tala, su papá y su amistad con Araujo
"El Tala en mi vida es mi segunda casa, vivía a tres cuadras del club. Cuando salía del colegio, los días que no dormía siesta, ya me iba al club y volvía a mi casa a las once de la noche. El Tala es todo para mí, siempre voy a estar agradecido de corazón a toda la gente de ahí, principalmente a los entrenadores que me formaron como jugador", subrayó.
Gabriel Andrés, un histórico exjugador de El Tala, es el papá de Alejo. Sobre esta situación el joven base de Atenas comentó que "que mi viejo haya sido jugador de básquet es algo bueno para mí ya que él me da los consejos necesarios para que yo pueda estar viviendo este presente. Sabe mucho de este deporte y trato de escucharlo siempre".
En tanto, al hacer referencia a su amistad con el sanfrancisqueño Máximo Araujo (hijo del exjugador Mauricio Araujo), que también surgió de El Tala, Andrés señaló: "A Máximo lo conozco desde que éramos chicos, prácticamente desde los 4 o 5 años, cuando jugábamos juntos en el club, siempre me encantó jugar a su lado. Lo aprecio mucho a él y también a su familia. Máximo está conmigo acá en Atenas, yo llegué a Córdoba mucho después de él". Al tiempo que subrayó: "Máximo tuvo una Liga de Desarrollo impresionante, la rompió ya que fue el goleador principal del equipo. Ahora ambos disfrutamos de estar juntos en Atenas".